Varias veces hemos contado cómo YouTube es el futuro de la creación de contenido, además de producir un fenómeno fan muy especial. El pasado domingopudimos asistir a nuestra primera quedada Youtuber en Bilbao y pudimos conocer en persona a Olga y Antonio, unos Youtubers que seguimos desde hace un tiempo en su canal Olga y Antuán y a los que vemos prácticamente todos los días mientras desayunamos. En su día fueron «Youtuber recomendado» en nuestros vídeos. Y los seguimos recomendando cada vez que podemos porque nos encantan.
Nos han enganchado, entre otras cosas, porque hacen vídeos en pareja (eso nos suena) y porque pertenecen al mundo del teatro. Ellos son actores, directores, escritores de obras, tocadores de ukelele, contadores de historias… Tras un tiempo vlogueando en YouTube les llegó el éxito a través de una mención de otra Youtuber (Nohewi) y su canal, desde entonces, no deja de subir.
Uno de los puntos fuertes de su canal de vlogs es que nos enseñan su vida en USA. En San Diego. Se fueron a probar suerte con sus obras y para que sus hijos aprendieran inglés, y la vida les hizo llegar al éxito a través de YouTube.
A nosotros nos resulta gente muy interesante no sólo porque nos entretienen con sus, a veces, idas de olla, sino porque nos hacen reflexionar mucho y aprendemos muchas cosas con ellos. Por ejemplo, a decir «little Italy» correctamente 😉 También nos encanta el paseo de amigos y conocidos por el canal a los que terminamos cogiendo mucho cariño, como Jordi y Ana, Alberto, Esther o los padres de Olga que son de traca.
Nos quedamos con mucha pena de no poder ir a Madrid a su primera quedada, pero el destino, universo, suerte… hizo que se acercaran a Bilbao a trabajar y a visitar a sus amigos, y decidieran hacer una quedada expres. Así que allí nos fuimos, cual adolescentes a un concierto de los Beatles a ver a esos extraños pero conocidos acompañantes desayuneros y a pasar un rato con ellos. Un rato que se extendió más allá de la propia quedada cuando nos quedamos a comer con ellos.
No nos pudieron atender mejor. Fueron en todo momento amables, simpáticos y atentos. Una de las cosas que más nos sorprendió fue que ¡habían visto varios de nuestro vídeos! Aquello nos dejó un poco descolocados, la verdad, pero oye, ahí están y cualquiera los puede ver.
En resumen fue una muy buena idea quedarse en Bilbao y poder ver a Olga Y Antuán en acción.
Para todos aquellos que comentan en sus vídeos que les gustaría achuchar a Jordi, queremos decirles una cosa: ¡Nosotros lo hicimos varias veces y es muy achuchable! Jajajaja. Y muy majete.
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